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Estudiar online: consejos para estar preparado para esta modalidad
Con el respeto que la modalidad de educación a distancia (EAD) se ha ganado en los últimos años, especialmente luego de la regulación del Ministerio de Educación (MEC), la idea de que estudiar en línea era una alternativa “más fácil” a tener un diploma definitivamente pasó por alto. .
Esto se debe a que tanto un curso de pregrado como un curso de post-licenciatura tienen los mismos requisitos que los cursos presenciales. Lo que sucede, sin embargo, es que nadie estará «mirando» todo el tiempo si usted está haciendo sus tareas. Algunas escuelas facilitan mucho este aprendizaje combiando clases presenciales intensivas, por ejemplo: este curso de masaje online, así lo hace. Por eso hay que estar preparado para afrontar esta experiencia.
Al igual que en los cursos presenciales, el compromiso y la participación del alumno son elementos fundamentales para lograr un alto rendimiento, a veces el tener que rendir cuentas después de forma presencial ayuda a este tipo de cursos como el de masaje que comentamos antes. Sin embargo, es necesario adquirir nuevos hábitos, cierta constancia y mucha autonomía.
Pensando en ayudarte a tener el mejor rendimiento en tu curso EAD, hemos recopilado en este artículo algunos consejos infalibles para que tengas éxito en tus estudios. ¡Quédate con nosotros y comprueba cuáles son!
1. Comprender la rutina del curso online
El estudio en línea comienza con el reconocimiento de la rutina del curso y la familiarización con el entorno de aprendizaje virtual (AVA). Al igual que con los cursos presenciales, es necesario conocer quiénes son los profesores responsables, qué herramientas de estudio están disponibles, cómo es el sistema de evaluación, entre otros elementos que son específicos de cada institución educativa.
Los cursos de ODL normalmente se dividen en módulos que duran algunas semanas. Cada módulo está destinado a una secuencia de contenidos y cuenta con un profesor-tutor encargado de coordinar las actividades, aclarar las dudas de los alumnos, proponer interacciones en foros y evaluar las producciones de cada participante.
El VLE se convierte entonces en una especie de «aula». Allí se concentran todos los materiales, el calendario con el cronograma de tareas, las actividades a realizar, además de los contactos de compañeros y profesores responsables. Este será el principal punto de comunicación del curso, considerando estudiantes, profesores y la institución educativa.
Por tanto, esta característica debe ser explorada por el alumno para que no se pierda en ningún momento y pueda adaptarse a esta nueva rutina.
2. Determinar el tiempo de dedicación para estudiar en línea.
Una de las primeras pautas que suelen dar los cursos a distancia a los estudiantes está relacionada con el tiempo mínimo de dedicación para un buen desempeño. En general, la dedicación ideal es alrededor de 50 minutos a la 1:30 am al día durante unos días a la semana (pero eso es).
Sin embargo, esta es una media general, ya que todo dependerá de las características del curso y también del grado de facilidad o dificultad del alumno. Otro punto a considerar es el horario de cada persona. Si bien algunos pueden dedicar más tiempo a los estudios, otros tienen su rutina bastante comprometida con el trabajo, la familia y otros motivos.
Por lo tanto, la flexibilidad se convierte en una de las mayores ventajas que ofrece EAD, permitiendo que todos encajen el curso lo más posible en su vida diaria.
Para aquellos que aún no tienen experiencia en estudiar en línea, el consejo es considerar las pautas del curso y establecer cuánto tiempo disponible puede dedicar a las actividades programadas.
Intenta distribuir los estudios según los días que tengas más tiempo libre, preferiblemente aprovechando momentos de mayor productividad. Si es necesario, aproveche las pausas para el almuerzo o el tiempo libre (como el tiempo que pasa en los desplazamientos al trabajo) para estudiar un poco. Aproveche el hecho de que se puede acceder a los materiales desde cualquier lugar con Internet y utilice esta función a su favor para evitar que las tareas se acumulen.
3. Crea un plan de estudios
Así como tienes un plan de trabajo o plan para no olvidar los pagos mensuales, también necesitas crear un plan de estudios. Al establecer un espacio en tu agenda que esté completamente dedicado al curso, elevas la importancia de estar completamente integrado en las actividades y reduces significativamente las posibilidades de no tener resultados positivos.
Una buena idea es crear un horario dividiendo las materias que se deben estudiar y las actividades que se deben realizar en cada período. Si es posible, deje este plan escrito en algún lugar visible para que pueda acostumbrarse a consultarlo todos los días para no perderse ninguna actividad.
Además, siempre resalte las actividades que ya se han completado, esto ayuda mucho a ser más consciente del camino ya recorrido, lo que mantiene la sensación de logro.
Por cierto, utilice la tecnología si se siente mejor. A muchas personas todavía les gustan los calendarios de papel y los recordatorios, pero no se puede negar que las herramientas tecnológicas lo hacen muy bien. Por ejemplo, cree alertas en su móvil para fechas límite de tareas y mantenga sus materiales guardados “en la nube” para tener sus archivos a mano. Dropbox y Google Docs son geniales
